¡Dios quiere que respondamos a Su amor por nosotros, amándolo – que lo amemos voluntariamente! (conferencia para jóvenes en Polonia)

¡Recientemente hubo una Conferencia de jóvenes en Lipowiec, Polonia, y algunos de los queridos buscadores se reunieron para disfrutar al Señor y pasar un fin de semana en Su Palabra! ¡Hay tanto que decir acerca de este Cristo maravilloso, Su Palabra, Su vida divina y Su dulzura! A continuación el breve pero dulce testimonio de algunos jóvenes que estuvieron allí durante la conferencia – acerca de lo que más disfrutaron ellos[read these testimonies in English also via, God wants us to love Him back – willingly love Him! (young people’s conference in Poland)]:

Tuvimos un tiempo maravilloso en Lipowiec este año. Fue muy agradable ver a los jóvenes orando, cantando y compartiendo. Fui tocada con la palabra respecto a que el Señor nos ama tanto y que Él no quiere que hagamos obras para Él sino sólo que respondamos a Su amor por nosotros, amándolo a Él. ¡Sin Él estamos vacíos y solos! ¡Solamente Él puede llenar nuestro vacío! [Hermana Edyta O.]

Queridos santos: Me gustaría compartir con vosotros algo que me tocó mucho en la conferencia en Lipowiec, Polonia. ¡La Biblia es un libro de vida! Cuando creímos en Dios obtuvimos una nueva vida en nosotros. Dios ha venido a ser nuestra misma vida ahora y Él es ahora la Persona más importante. El Señor ahora quiere que lo amemos y vivamos con Él. Él quiere que nos abramos a Él y que pasemos tiempo con Él. Me impresionó escuchar que puedo pasar 7 minutos con el Señor [cada día]. Son sólo 7 minutos, pero puede ser un comienzo de día maravilloso. ¡Oh, Señor, quiero pasar al menos 7 minutos de cada día contigo! ¡Alabado sea el Señor! ¡Aleluya! [Hermana Klaudia S.]

¡En Lipowiec, alejados del resto del mundo (al estar allí) pudimos enfocarnos en disfrutar al Señor! El ambiente fue verdaderamente como de una familia grande. Sólo deseaba que pudieran ser más de tres días. Lo que más disfruté fue que Dios nos creó con libre albedrío (capacidad para elegir) y “puso la eternidad en nuestros corazones [un sentido de propósito divinamente implantado en nosotros que ha estado obrando en el hombre a través de los siglos en el sentido de que nada bajo el sol que no sea Dios mismo puede satisfacernos]”(Eclesiastés 3:11). No somos esclavos de Dios (en el sentido humano). Él no nos obliga a amarlo al crearnos con ese [único] sentimiento inapelable. Nuestro Dios es tan grande que nos otorgó la capacidad de opción – Él no quiere esclavos (en el sentido humano) sino personas que lo amen cada día al escoger hacerlo cada día, ejercitando su libre albedrío. ¡Sólo así llegamos a ser verdaderos compañeros de Cristo! ¡Los esclavos (hombres forzados y encadenados en contra de su voluntad) no pueden ser compañeros de Su amo, sin embargo aquellos que siguen a Cristo por amarlo tanto, sí pueden ser compañeros de Cristo! ¡Señor Jesús, que seas nuestra elección cada día!